¿POR QUE A LAS AVES MIGRATORIAS LES FASCINA EL CAFÉ?
¿Cuál es la relación entre las aves migratorias y el café?
En medio de un ambiente cada vez más alterado y reducido, tanto en norteamérica como en la América Latina, las aves migratorias han hallado un santuario en un entorno semejante al de los bosques en las plantaciones de café tradicionales. Al este de Chiapas, México, biólogos del Centro da Aves Migratorias del Smithsonian Institution han concluido que las plantaciones de café y cacao manejadas en forma tradicional le ofrecen sustento a más de 150 especies de aves; una cifra muy superior a la encontrada en otras zonas agrícolas -y superada únicamente- por la encontrada en los bosques tropicales no perturbados. Incluso en las áreas sumamente alteradas, las plantaciones de café le ofrecen sustento a una gran cantidad de especies de aves migratorias y de otras especies -que prefieren o están restringidas a los hábitats forestales- tales como:
Sin embargo, debido a los cambios recientes, tanto en la producción
cafetera como en los mercados, las plantaciones de café con sombra
constituyen un hábitat amenazado.
Durante los últimos veinte años, el café se ha venido cultivando sin ninguna sombra de dosel o follaje superior. Aunque esta forma de cultivo produzca ganancias sustancialmente superiores, la misma no puede mantenerse por muchos años sin un manejo intensivo (es decir, sin añadírsele fertilizantes y limo); las plantas son propensas a una muerte prematura en aquellos ambientes con una estación seca marcada y requieren ser renovadas (es decir, reemplazo de las plantas) con una frecuencia mucho mayor que las variedades cultivadas con sombra.
Además de riesgos agroeconómicos,
durante las dos últimas décadas, la producción de café
sin sombra ha producido un cambio radical para las aves migratorias. De
las tierras cultivadas con café en forma permanente, la proporción
bajo los sistemas modernizados carentes de sombra oscila entre un 17% en
México y un 40% en Costa Rica hasta un 69% en Colombia. En los pocos
estudios conducidos se ha concluido que la diversidad de aves migratorias
se va a pique cuando se reemplaza el cultivo del café con sombra
por el de pleno sol. En un estudio se encontró un descenso de10 a
4 especies de aves migratorias comunes. De manera similar, en estudios generales
de avifauna, en México y Colombia, se encontró una disminución
del 94-97% de especies de aves en las plantaciones de café con sol
en comparación con aquellas con sombra. Lo anterior no sorprende
ya que más de dos terceras partes de las aves se encuentran alimentándose
en el dosel de las plantaciones sombreadas y menos de un 10% se encuentra
alimentándose en las plantas de café.
Una mirada más de cerca a la cara sombreada del café
Entre todos los sistemas agrícolas del trópico se ha encontrado que en las plantaciones de café sombreado se hallan algunas de las cifras más altas de individuos y de especies de aves migratorias:
o Chan Robbins y Alejandro Estrada, líderes de un equipo de investigadores de aves a lo largo del Golfo de México y de la cuenca del Caribe, encontraron que las plantaciones de cacao y café sostienen las cifras más altas de aves migratorias dependientes de los bosques de cualquier hábitat agrícola.
o En Where Have All the Birds Gone? el ecólogo tropical John Terborgh
afirma: "Algunas de las prácticas agrícolas son compatibles
con el sostenimiento de numerosas poblaciones de aves migratorias. Esto
lo aprendí hace muchos años cuando conduje conteos de aves
en el café y el cacao de la República Dominicana". Su
conclusión es que: "el café y el cacao constituyen un
buen hábitat para las aves migratorias", aunque pueden no encontrarse
algunas especies especializadas de los bosques, especialmente de especies
residentes.
Las plantaciones de café sombreado con frecuencia son el último refugio de los organismos adaptados a los bosques.
Para crecer con el tiempo necesario, los arbustos de café son cultivados bajo un dosel o cobertura forestal. Por lo regular, el café también se cultiva empleando técnicas agroforestales indígenas, desarrolladas originalmente para cultivar el cacao. Ello implica, plantar una mezcla de árboles fijadores de nitrógeno con otras especies útiles proporcionadoras de sombra. En algunas de las plantaciones manejadas en forma tradicional pueden encontrarse hasta 40 especies de árboles, muchos de los cuales se utilizan para producir bienes comerciales o familiares como madera o frutas.
Los árboles de sombra protegen las plantas de café del nivel inferior de la lluvia y del sol, contribuyen a mantener la calidad del suelo, reducen la necesidad de desmalezar y ayudan a controlar las plagas. La materia orgánica producida por los árboles de sombra también provee un abono natural que disminuye la necesidad de fertilizantes químicos, reduce la erosión, aporta nutrientes de importancia para el suelo y previene la toxicidad causada por metales.
Las plantaciones tradicionales de café pueden concebirse como hábitats forestales modificados. Incluso, cuando se planta como cubierta para sombra una sola especie de árboles, con gran frecuencia se producen cosechas de flores y frutos que consumen las aves omnívoras, tales como los gorriones de Tennessee y los orioles/ de huertas. Es posible que los desplazamientos hacia el norte y hacia la parte alta de las montañas se cronometren para aprovechar la floración de los árboles de las plantaciones.
En las regiones más utilizadas por las aves migratorias -Mesoamérica, las islas del Caribe y Colombia- "los bosques"de las plantaciones de café cubren 2.7 millones de hectáreas, lo que equivale a casi la mitad de las tierras cultivadas en forma permanente. En el sur de México, las plantaciones de café cubren un área de un tamaño mayor a la mitad de las principales reservas de selva húmeda tropical, proveyendo así un hábitat forestal crítico en elevaciones medias donde prácticamente no se encuentra casi ninguna reserva forestal grande.
Las aves constituyen sólo uno de los indicadores
del papel que desempeña el café en la protección de
la biodiversidad. Los estudios longitudinales de insectos, la cobertura
de dosel forestal, las orquídeas y los anfibios han demostrado que
las plantaciones de café son, con gran frecuencia, refugios críticos
para la protección de especies forestales en lugares donde ya no
queda ningún bosque.
Algo más que una simple pila de granos
El café sombreado ofrece una oportunidad doble, es decir, tanto de conservación como para de obtención de lucro económico, en la medida en que, una forma de agricultura tan relativamente benigna ha sido -y continúa siendo- una significativa fuente de ingresos para la región de América Latina y el Caribe.
Aunque el café haya tenido origen en el Viejo Mundo, América Latina y el Caribe exportan más de dos terceras partes de la producción mundial actual. El café es cultivado -en su mayoría y principalmente- por familias en fincas pequeñas. En los Estados Unidos el café constituye el tercer producto más corriente de importación, después del petróleo y del acero, respectivamente. Los Estados Unidos consumen aproximadamente un tercio del café mundial.
En cuanto a su valor económico en el mundo
moderno, el café es el segundo producto de exportación en
importancia después del petróleo. Sus divisas exceden los
10 mil millones de dólars anuales. El café equivale a la segunda
fuente principal de divisas para los países en vías de desarrollo
y, en América Latina y el Caribe, es de especial importancia, por
ser la principal fuente de divisas.
Cuando lo nuevo no necesariamente equivale a mejor
El cultivo productivo de café al sol requiere de insumos químicos y de fuerza laboral durante todo el año, lo que genera demandas financieras y la necesidad de crédito para los cultivadores. En consecuencia, la mayor parte de la "tecnificación del cultivo del café (plantaciones a pleno sol) es llevada a cabo por los mayores propietarios de tierras.
Aunque el café tecnificado pueda hacer pensar
en la noción de progreso, en términos del resultado total
de las cosechas --una condición que puede no ser válida a
largo plazo y cuya falsedad ya ha sido demostrada en algunas áreas
en donde se cultiva el café a pleno sol- el empuje de la agroindustria
para producir más café por unidad de área puede llegar
a tener serias implicaciones ambientales y sociales. El cultivo del café
sin sombra parece conducir a una erosión del suelo mucho mayor, así
como a la acidificación y a mayores cantidades de escorrentía
tóxica. Además, el café sin sombra ocasiona la pérdida
de los árboles que le aportan al cultivador no sólo cosechas
de "seguridad" o respaldo (por ejemplo, leña, madera, cítricos
y otros árboles frutales plantados en el dosel forestal), sino que
contribuyen a aminorar el cambio climático.
El punto de encuentro entre la conservación
ambiental y las fuerzas del mercado
Cada vez es más obvia la relación existente entre la agricultura sana, la salud a largo plazo de los agricultores rurales y el mantenimiento de la biodiversidad. Debido a su alta rentabilidad por unidad de área, en comparación con la producción de maíz o de carne, el cultivo del café ha sido percibido como una de las formas en que los pequeños propietarios pueden obtener dinero en efectivo con una inversion relativamente pequeña. El cultivo tradicional del café reduce la dependencia de los agricultores de la aplicación de costosos químicos, a la vez que protege a los caficultores y a sus familias de los posibles efectos perjudiciales por el contacto con pesticidas.
Sin embargo, la gran dependencia de los agricultores de muchos países, de un sólo producto de exportación, con frecuencia da lugar a la superproducción del mismo. El impacto del superávit de café a nivel mundial fué atenuado por el Pacto Internacional Cafetero que recurrió al almacenamiento del grano de café por parte de los países miembros. El colapso de este acuerdo (en 1989) y la tendencia hacia la economía del libre mercado han causado una crisis en la producción cafetera. En el caso de un colapso de los precios, los países productores como Colombia han tomado medidas drásticas para modernizar la producción obligando a los productores pequeños e "ineficientes" a emplear la tierra en formas alternativas. Con la reducción simultánea del acceso a los créditos agrícolas, muchos agricultores luchan por satisfacer sus necesidades, e incluso, algunos se han visto forzados a alterar sus plantaciones de café mediante la tala de los árboles de cobertura para obtener leña, o han abandonado definitivamente el cultivo del café como su fuente de sustento
La conservación de las aves migratorias
depende de la conservación de los hábitats, pero los parques
y las reservas exclusivamente no ofrecen un espacio adecuado para la protección.
El destino de las aves migratorias, así como de otra gran variedad
de especies, depende de la calidad de los hábitats manejados por
los seres humanos. La salud de los ecosistemas templados y tropicales está
estrechamente ligada en virtud de la migración anual de millones
de aves y, al respecto, las plantaciones de café con sombra juegan
un papel protagónico. Esta forma de uso de la tierra puede estar,
en sí misma, en vías de convertirse en una especie amenazada.
Al beber su próxima taza de café, cuestiónese lo siguiente:
¿Estaría usted dispuesto a pagar más por el café
si supiera que el dinero extra sería utilizado en servicios de extensión
y en crédito accesible para que los caficultores puedan sobrevivir
y, por ende, cultivar el café en una forma más amigable con
las aves?
Lecturas complementarias:
Benitez, J. and I. Perfecto. 1989. Efecto de diferentes tipos de manejo de cafe sobre las comunidades de hormigas. Agroecologia Neotropical 1(1):11-15.
Equal Exchange. 1994. Making coffee strong: Alternative trading in a conventional world. Equal Exchange, 101 Tosca Drive, Stoughton, MA 02072
National Research Council. 1993. Sustainable Agriculture and the Environment in the Humid Tropics. National Academy Press, Washington, D.C.
Pimentel, D., U. Stachow, D.A. Takacs, H.W. Brubaker, A.R. Dumas, J.J.Meaney, J.A.S. O'Neil, D.E. Onsi, and D.B. Corzilius. 1992. Conserving biological diversity in agricultural/forestry systems. BioScience 42(5):354-362.
*illustrations and web design of this page (except below) ©shannon palmer 1997.
Written by Martha Van der Voort and Russ Greenberg
Translated by Claudia Caicedo
<